En un verdadero gesto de "humanidad", un comensal dejo mil dólares de propina, necesarios para pagar los gastos médicos y salvarle la vida al perro de una camarera, que se había comido una bola de plástico.

EE. UU.- Una camarera con un perro enfermo, tuvo un regalo inesperado y sorprendente de apoyo de parte de un completo extraño. Cristina Summitt tiene un tatuaje con una huella de pata de perro en su muñeca, que a menudo conduce a conversaciones con la gente acerca de los perros. Ella tiene un perro llamado Tucker, un mestizo de labrador y una pit bull rescatada a los que quiere mucho.

Mientras que estaba atendiendo en el bar restaurad del hotel Holiday Inn en Clinton, Nueva Jersey, el sábado pasado, por la noche mientras charlaba con una pareja muy agradable, el hombre le preguntó si tenía un perro, a lo que ella respondió que si, y les contó brevemente que Tucker estaba muy mal, que había sido trasladado a un hospital de emergencia días después de que él se había tragado una bola de plástico duro.

Siguiendo con la charla, luego le pregunto si era una cirugía muy cara. Ella contesto que era alrededor de $ 2,700, pero que iba a hacer hasta lo imposible por su amado perro, a quien adoptó en 2011, ella tiene tres trabajos pero dijo que incluso vendería su auto con tal de salvarlo.

Luego contó a CNN que la pareja ordenó bebidas y la cena en el bar por un valor de $ 80, pero cuando llegó el momento de pagar la cuenta increíblemente, el hombre pago el recibo por $ 1.080, 1000 eran para ella.

Ante tal gesto, Cristina quien tiene 3 hijastros dijo que comenzó a temblar y llorar. Ella le mostró la factura a su hermana, que trabaja en el bar con ella, para asegurarse de que estaba viendo bien la cantidad.

Luego regreso y le dijo: "Señor, yo no puedo aceptar esto, ¿qué es esto?, ¿por qué hacen esto?", el respondió que se lo dio para los gastos médicos de Tucker.

"Yo me quedé en estado de shock! Caminé alrededor y abracé a esta pareja que al final me dijeron: "Vamos a estar orando por Tucker."

El director del hotel Michelle Satanik, luego de verificar que el pago era legítimo, descubrió que el generoso benefactor (que desea permanecer en el anonimato) lo hace "con mucha frecuencia", y es "sólo un tipo muy agradable y humanitario."

Cristina Summitt compartió sus emociones en su cuenta de Facebook mostrando las fotos de este gesto solidario. Dice que ha recibido mensajes de apoyo de todo el mundo.

El dulce Tucker ahora se está recuperando en casa gracias a la solidaridad "humana".

"También me gustaría agradecer públicamente a esta pareja frente de todo el mundo. Nunca he visto un acto al así, capaz de darle tanta, tanta esperanza a la gente", escribió.

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