Sacarlos de su hábitat ya estaba mal, pero esclavizarlos, torturarlos y obligarlos a soportar peso todo el día, solo por diversión... es demasiado. Entérate lo que sucede.

No todo es justificable y lo que están padeciendo los dromedarios obligados a trasladar turistas en Rió Grande del Norte, Brasil, es realmente absurdo, tan absurdo como lo es secuestrar elefantes bebés de sus madres, maltrataros y amedrentarlos toda su vida para colgarles unos canastos encima para pasear turistas en Asia o Africa.

Si pensabas pasar vacaciones en Río Grande del Norte, Brasil, específicamente por la zona de Genipabú, Natal, te depararás una escena triste con éstos pobres animales a pleno sol, fuera de su hábitat, con bozales y pesadas cestas plásticas, esclavizados 12 horas cada día, para cargar turistas irresponsables por las arenas de las playas locales y cobrar fortunas por ello.

Quizás digas, pero los dromedarios están acostumbrados al desierto ¿que tiene de malo?

Tiene de malo que ningún animal debe ser utilizado y abusado para el divertimento de otro animal que se supone debería ser más racional... el humano. Tiene de malo que los animales trabajen 12 horas por día, que no coman cuando tienen voluntad de hacerlo y solo cuando los dueños lo deciden, que no puedan parar a beber agua cuando desean, sino cuando se las ofrecen. Tiene de malo que solo puedan descansar cuando logran arrojarse aún sobre arena caliente sin siquiera una sombra para al menos descansar sus piernas.

El dromedario es un animal que es verdad, está acostumbrado a temperaturas elevadas, a vivir en el desierto, en el cruel clima de Arabia, pero no a cargar 12 horas por día gente vacía y falta de otra cosa que hacer.

Un dromedario NO ES UN CAMELLO, son una especie similar y se diferencia de los camellos por su pelaje generalmente más corto, cuerpo menos robusto y presencia de una joroba en lugar de dos.

El humano se ha encargado de sacarlo hace muchos años de su hábitat natural, que era la península arábiga y lo ha introducido en un sinfín de lugares, pero sus hábitat normales son justamente la zona de Arabia Saudita y el norte de África

La empresa que tiene los dromedarios se llama Dromedunas, propiedad del francés Philippe Landrye y de su esposa Cleide Batista y explota dromedarios con fines turísticos hace más de 10 años en las playas de Genipabu, a 20 Km. de Natal. En el año 2000, cerca de 10 animales fueron traídos desde las Islas Canarias (frente al continente Africano), con una inversión inicial de USD 15,000.

Desde entonces, la empresa invirtió parte de los lucros obtenidos con la explotación de los dromedarios, en reproducirlos. Hoy tienen 19 animales que rinden unos USD 10,000 POR MES. ¿Ves cuando te decimos que el motivo de quien explota animales es económico y que cuando nosotros les dejemos de pagar el negocio deja de existir?

Los dromedarios pasan casi 12 horas por día (desde las 07:30 hasta que cae el sol) cargando turistas que se vuelven locos por el paseo "exótico" del que podrán postear fotos en Facebook, Instagram, etc, etc para jactarse de cuan "cool" son, sin darse cuenta que no es un inocente paseo lo que están financiando con su dinero y que ese dromedario está condenado culpa de gente como ellos que paga por darse un "paseíto"

Cuando no están con turistas en sus espaldas, los animales se echan la arena aunque esté caliente, para descansar un poco. Todo el tiempo ellos son mantenidos con bozales de tela absurdamente incómodos y que les impiden respirar bien.

Ellos les colocan estos artefactos, para que no muerdan turistas, solo coman lo que ellos les ofrecen a la hora que ellos quieren que los animales coman y no cuando éstos tienen ganas de hacerlo, etc.

En 2011, la empresa Dromedunas acabó en la justicia acusada de tener el establo de los animales en un área de protección ambiental que es propiedad del Estado. Acabo denunciada por un tema de padrones de propiedades, pero no por el abuso animal...

Si pensabas visitar Río Grande del Norte, no te decimos que no lo hagas, pero evita fomentar la explotación de animales. Este estado es uno de los más bonitos de Brasil y ciertamente merece verse libre de la explotación de especies para el turismo. En el lugar hay demasiadas cosas para hacer, que el hecho de explotar los animales para que exista una más no tiene sentido alguno ni sustento posible, sobre todo porque ESTÁ MAL explotar animales para el fin que sea.

Pero, al menos hay esperanza. Parece que en Brasil las cosas pueden ser diferentes y comenzar a mejorar. Allí y bajo la Comisión Parlamentaria de Investigación sobre malos tratos a los animales, el caso de los dromedarios explotados en Natal será revisado en audiencia pública, con la presencia de la promotora de Medio Ambiente de Natal Rossana Mary Sudário.

Según la iniciativa de ésta comisión, que partió del diputado Ricardo Izar, las "entidades de defensa de los derechos de los animales se manifestaron, solicitando que los responsables por los malos tratos, abuso y explotación de animales se responsabilicen por los mismos".

Esperemos que al menos en ésta ocasión los animales sean considerados y se diga un basta en la explotación sin sentido por puros fines frívolos y que las autoridades sean más pro activas a éste tipo de modas comerciales, porque los animales no son productos que deban ser utilizados para rentabilizarlos mientras sufren abusos.

Existe una Petición en linea para acabar con ésta explotación y ofrecerle nuestro apoyo a los activistas brasileños para acabar con ésta pesadilla para los pobres animales. Si deseas acompañar la iniciativa firma la petición AQUI

Si desea conocer más sobre las manifestaciones en contra del maltrato hacia los animales, así como movilizaciones por sus derechos puede dar clic aquí