Cuatro pequeños gatitos y su madre estuvieron a punto de morir de frío, sino fuera porque un grupo de personas de buen corazón, actuaron a tiempo haciendo algo hermoso por salvarlos.

Cuatro pequeños gatitos y su mamá estaban dando vuelta en las afueras del jardín de una casa en Londres una noche invernal de mucho frío. En el área hay una gran población de zorros y los dueños de casa sabían que el pequeño clan, no estaría seguro por mucho tiempo a la intemperie y expuestos.

La familia dentro de casa tenían perros, no muy amigos de los gatos por lo que tenían miedo que al ingresarlos algún desastre se suscitara y fue entonces que pidieron ayuda al centro de rescate Cat Cudless que respondió al llamado de inmediato.

Pero cuando llegaron se dieron cuenta que el rescate sería un poco más difícil de lo que habían esperado...

"Debido a que los gatitos estaban en una situación de tanta vulnerabilidad, la situación fue tratada con la emergencia que ameritaba y respondimos de inmediato" dijo Rae Gellel, voluntaria de Cat Cudless y agregó "Los cuatro gatitos bebés y su madre cuando llegamos, estaban completamente inalcanzables, se habían metido dentro de un conducto de aire que habían tomado como su "hogar" y que se extendía por todos los cimientos de la casa en un profundo laberinto de túneles oscuros con corrientes de aire"

Para rescatarlos sería necesario atraerlos fuera, principalmente a su madre, porque no había forma de entrar y alcanzarlos. Los bebés no habían tenido jamás contactos con humanos antes y lograr que se acercaran sería muy difícil, por lo que la esperanza era, atraer a su mamá.

"La situación de la madre tampoco era la más alentadora, porque si se diera el caso de poder alcanzar los gatitos primero, ella podría escapar y nuevamente quedar embarazada en menos de un mes" dijo Gellel.

Las dos primeras noches luego de descubrir la familia, los voluntarios lograron atraer y rescatar tres de los gatitos con bastante facilidad. Gellel llevó los pequeños a su casa para cuidarlos y pudo ver que estaban además de sucios, llenos de pulgas y anémicos, por lo que era lógico que el gatito bebé que aún quedaba sin rescatar y la mamá, estaban en iguales condiciones por lo que era imperioso rescatarlos.

Durante ocho noches, los equipos de rescate esperaron fuera del agujero para esperarlos y tener las mayores chances de rescatarlos. Ocho noches de guardia, despiertos, sorportando también el frío del ambiente por salvar dos vidas... porque toda vida vale como siempre decimos aquí en Seamos Mas Animales.

Pudieron poner una trampa con comida para atraer la mamá y su gatito y como siempre hay gente ruin rodeando, también debieron quedarse en el lugar para evitar el hurto de la trampa en caso de dejarla sin vigilancia.

Y así, en el frío, el barro y el agua nieve esperaron pacientemente para salvar 2 vidas...

En la octava noche, la mamá salió al fin y pudo ser capturada y los equipos de rescate al verla surgir sola de dentro del tubo de aire, tuvieron miedo que el pequeño gatito no habría sobrevivido tantos días.

Tuvieron que tomar una difícil decisión en ese momento. Tomaron la mamá y la llevaron junto con sus otros pequeños a la casa de Gellel pero no perdieron la esperanza de asegurar al último gatito que querían creer y confiaban que podrían sacar de allí.

"Ella se reunió con sus pequeños como si el tiempo no hubiera pasado, los lamió y acicaló amorosamente" dijo Gellel.

Un día más pasó sin señales de que el último pequeño estuviera vivo y el grupo estaba a punto de perder las pocas esperanzas que quedaban, cuando de repente, el pequeño surgió, curioso mirando hacia fuera del tubo, antes de desaparecer de nuevo bajo la casa.

Gellel entonces se sentó fuera del agujero sola, con paciencia y cantando suavemente de repente vio un par de bigotes asomarse tímidamente. Durante un par de horas más el pequeño se asomaba y se volvía a meter, hasta que en una de esas salidas, Gellel fue capaz de bloquear la salida para que él no pudiera volver a meterse allí dentro y al fin, poder rescatarlo.

Millie y Phoebe

"El instinto inmediato del pequeño fue correr de nuevo al agujero, pero al encontrar que estaba cerrado corrió a la esquina más próxima y se acurrucó de miedo" dijo Gellel y agregó "Entonces simplemente lo que busqué fue acariciarlo y hacerlo dejar de sentir miedo para poder alzarlo y llevarlo a casa"

Y al fin, luego de ocho largos (y congelantes días) toda la familia fue finalmente rescatada por éste hermoso grupo humano llamado Cat Cudless.

Sully y Boo

Gellel llevó el cuarto gatito a su casa y después de ser higienizado, fue reunido con su mamá y hermanos. "El se acurrucó directamente sobre su mamá y al poco estaba ya mamando. Sus hermanos lo examinaron en detalle, lo olfatearon y luego lo aceptaron sin duda"

Gellel fomentó toda la familia durante dos meses completos hasta que, ellos fueron adoptados en vísperas de año nuevo el año pasado.

La mamá Lana

Y los pequeños recibieron además de un hogar, sus nombres...Millie, Phoebe, Sully, Boo y la mamá Lana. Los cinco gatos están prosperando mucho en sus nuevos hogares, todo gracias a los equipos de rescate que jamás se dieron por vencidos y nunca perdieron la esperanza.

Muchas veces pensamos que es muy difícil poder rescatar un animal de una situación peligrosa, y a veces lo único que nos falta es abrir la puerta de casa y dejarlos entrar... valoremos y apoyemos las personas que ayudan a los animales y disponen su tiempo y hasta su salud para hacerlo... porque no son muchas personas las dispuestas a ello y tenemos que cuidar y apoyar los que si lo hacen.

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