Cuando Honey desapareció dejando solo un rastro de sangre, su dueño temió que lo peor había sucedido, y estaba en lo correcto, pero la historia no terminaría ahí. Conoce su historia en el artículo.

Un viejo dicho popular reza que "los gatos tienen nueve vidas", y en el caso de Honey, le han valido para que su brillo no se extinguiera luego de un brutal ataque con un cojinete de bolillas que impactó en su cráneo y le causó lesiones gravísimas.

La suerte de Honey, además de sus nueve vidas, sumada a unos veterinarios que además de profesionales tenían real pasión por ella y salvar su vida, y un par de padres que no bajaron los brazos nunca, han trabajado en favor de Honey y en sus manos, ella transcurrió 8 operaciones quirúrgicas que le han permitido hoy estar con vida.

Luego de ser agredida brutalmente fue dejada por muerta por sus agresores, hasta que fue encontrada y rescatada por su dueño, quien corrió a la veterinaria por atención para su pequeña.

Vicki, Honey y Albert, luego de meses de lucha, celebrando la victoria

El ataque que Honey recibió no está claro aún, pero todo comenzó cuando su dueño, un jubilado llamado Albert Cook, encontró la cama de su amada Honey de 9 años de edad, cubierta de sangre y ninguna señal de ella por la casa.

Buscándola desesperadamente por toda la casa y el jardín, Albert finalmente encontró a Honey, tumbada bajo un arbusto, ya entregada a morir allí. "Quienes hemos tenido gato sabemos que cuando ellos se sienten tan mal que presienten que van a morir, tienden a alejarse de nosotros y meterse y esconderse en sitios de los que jamás los encontraremos y mi preocupación mayor era con relación a ello, porque si ella se sentía morir, yo jamás podría haberla encontrado, pero por suerte lo he hecho!" dijo Albert

Inmediatamente llevó a Honey a la veterinaria de PDSA en Basildon. Al mirar sus heridas creyó que un coche la habría impactado, aunque todo era difícil de ver porque la cabeza de Honey era todo sangre y pelo lleno de más sangre.

Albert, de South Ockendon, Essex, Reino Unido, ha tenido a Honey desde que era una gatita bebé y ha sido su compañera para el y su esposa durante toda la vida.

Recién llegada a la veterinaria... allí estaba la causa de la herida de Honey...

Llegando a la clínica, de inmediato se le practicaron Rayos X y fue revelado que el motivo de la herida era mucho más siniestro que apenas un atropellamiento "accidental". Los veterinarios encontraron un cojinete de bolillas (munición) alojada en el cráneo de Honey.

Honey había recibido un disparo en la cabeza, con un cojinete de bolillas de mármol que por su tamaño y composición es tremendamente destructivo, porque no solo penetra el cuerpo, sino que destroza a su paso lo que encuentra justamente por su tamaño excesivo.

Reconstrucción: El cráneo reconstituído luego de ocho operaciones ha permitido que Honey sobreviviera.

Durante cuatro meses, ocho operaciones se llevaron a cabo para eliminar la munición y ayudar a que Honey se recuperase. Lamentablemente ella perdió su ojo y la inmensa fuerza de la explosión destrozó la cuenca de su ojo y la mandíbula. en la radiografía puede verse la reconstitución de su mandíbula con un injerto metálico.

La frágil, pero fuerte de corazón Honey, soportó meses de alimentación por sonda y las infecciones recurrentes de semejante herida, sin jamás dejar atrás su lucha por la vida, pero a pesar de todo esto, ella en ningún momento dejó de ronronear cariñosamente a sus dueños y a los veterinarios que tan amorosamente cuidaban de ella. Cada vez que sus heridas debían ser limpiadas y curadas y cuando debían cambiarle la sonda de alimentación. Jamás se quejó o aruñó a nadie... "es realmente un animalito increíble" dijo uno de los veterinarios del equipo

Sintiéndose mejor: Honey y su Papá, después de ocho operaciones para salvar su vida

Ella ahora está finalmente de regreso a casa luego de su recuperación y se ha adaptado rápidamente y como la mayoría de los animales, a su diferente forma de ver el mundo, ya que al no tener los dos ojos, perdió la visión de profundidad, por lo cual le cuesta mucho más realizar saltos, calcular distancias, etc. pero como todo animal en este mundo, las adversidades no los doblegan y ellos... se adaptan mucho mejor que cualquier humano!

Su camino a la recuperación no fue fácil y tomó meses de tratamiento especializado del equipo veterinario de PDSA y la devoción de sus propietarios para recuperar la vida y calidad de vida de Honey.

Albert dijo "Estamos absolutamente felices de que Honey todavía esté con nosotros. Mi esposa y yo estamos infinitamente en las nubes por el milagro de tener su vida a salvo y jamás podremos agradecer lo suficiente a las personas de PDSA!"

Lesiones impactantes: Los veterinarios de PDSA encontraron un cojinete de bolillas alojado en el cráneo de Honey

Los veterinarios de PDSA, principalmente la doctora Vicki se ha encargado personalmente del caso y ha dicho "De verdad que el caso de Honey fue uno de los más fuertes que me ha tocado atender; cuando la vi llegar creí que sus heridas eran demasiado par su pequeño cuerpo y que no sobreviviría siquiera aquella noche, realmente estaba muy grave. Todas las operaciones que ella pasó fueron de extrema delicadeza, su salud estuvo siempre delicada y cada procedimiento fue una batalla en donde teníamos las mayores posibilidades de perder la batalla, porque eran heridas cercanas al cerebro y porque la herida y daño eran enormes. La única forma de salvarla eran las cirugías, a pesar de las pocas posibilidades que tuvimos siempre. Sin embargo, ella nos ha sorprendido y demostrado que cuando un ser vivo se aferra a su vida, todo es posible"

Afortunadamente ella ahora está de nuevo en su hogar, junto con su madre y padre humanos, felices de tenerla con ellos, con salud y aprendiendo a manejarse con su visión reducida y feliz de estar con vida, ronroneando en el regazo de sus felices padres.

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