Este perrito posiblemente tiene algunas papilas gustativas inusuales ya que increíblemente se comió 62 cintas para el cabello, ocho pares de ropa interior y una curita, por ello tuvieron que hacerle una cirugía exploratoria.

La dueña de Tiki, Sara Weiss, después de notar que su amado perro no había respondido a la medicación para tratar los vómitos, diarrea y la falta de apetito que había tenido en los últimos días, lo llevo al veterinario donde las radiografías mostraron una masa misteriosa en su estómago.

El veterinario, Dr. Hisham Ibrahim, junto a sus asistentes hicieron una cirugía en el estómago de Tiki la semana pasada y realizaron un descubrimiento que realmente los dejo asombrados.

Les tomo alrededor de dos horas para extirpar quirúrgicamente una variedad de elementos, incluyendo cintas para el pelo por decenas y suficiente ropa interior para que alguien use por más de una semana.

La extracción de todo fue como un mago sacando una larga cadena de bufandas de un sombrero. "Eso es exactamente lo que está pasando. Era simplemente increíble, y no es fácil. Pero, gracias a Dios, hemos sido capaces de salir adelante y Tiki del recuperado muy bien ", dijo el Dr. Ibrahim.

Sara Weiss recordó que nunca había pasado algo así, la única vez que Tiki había comido algo "extraño" fue una vez que tragó un dardo de espuma de plástico, pero que pasó por el sistema del perro naturalmente.

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