Hace 25 años... en 1991... ¿te das cuenta todo el tiempo que ha pasado? Tu, nosotros y muchos disfrutamos de éstos años, pero Joe, pasó un infierno en ellos.

Cuando Edwin Wiek, fundador de Wildlife Friends Foundation Thailand (WFFT) recibió un e-mail de un vecino de Bankok preocupado con un mono que vivía en un agujero sucio y oscuro a un lado de la carretera, supo que tenía que actuar inmediatamente.

Wiek y su equipo fueron guiados hasta donde el mono se encontraba y lo que ellos encontraron fue algo fuera de estándar de todo lo que podían imaginarse y que ya habían visto..

En un post en Facebook, Edwin escribió "Yo he visto mucho sufrimiento animal los últimos 17 años de mi vida, pero puedo decir que las condiciones en las que éste mono era mantenido, eran el 1 del Top 10 de los casos más horripilantes que ya he manejado"

Ellos descubrieron que Joe estaba en aquel inmundo agujero desde 1991!! El vivió en aquel pequeño pedazo de infierno por los últimos 25 años! Pero no era que su dueño lo había abandonado y el estaba solo allí, al contrario, su cruel tutor lo mantenía allí y lo visitaba de vez en cuando.

Cuando el equipo buscó al propietario para "intercambiar unas ideas", el desistió rápidamente de Joe... El equipo actuó rápido. Ellos sedaron a Joe, derrumbaron la inmunda y vergonzosa jaula que lo aprisionó por 25 años y sacaron al inocente animal, totalmente débil, hacia fuera. Su espacio para vivir era tan pequeño que probablemente no podría caminar ni escalar.

Como los automóviles no pueden pasar por el asentamiento de personas que hay al lado de donde Joe fue rescatado, el equipo lo cargó en sus brazos hasta la delegación de policía local para registrar el rescate. Entonces luego, se llevaron a Joe al santuario de la WFFT para comenzar su recuperación.

En una conmovedora declaración, Edwin reflexionó lo siguiente:

"Yo llamo a Tailandia mi hogar desde 1990, son 26 años. El martes me di cuenta que todo ese tiempo en que viví y trabajé en Tailandia, éste inocente ser vivo estuvo en aquella asquerosa prisión, esperando que alguien fuera a rescatarlo, que alguien lo viera, que alguien hiciera algo por él... si pudiera pedir algo, habría pedido que me pudieran avisar sobre él 25 años atrás"

Desde que Joe llegó al WFFT, comenzó a moverse a pesar de estar aún muy débil. Con suerte el se pondrá suficientemente fuerte para escalar pronto. Por lo pronto, tal como el equipo sospechaba, sus músculos atrofiados no se lo permiten.

Joe también tuvo la oportunidad de interactuar con otros monos (luego de 25 años sin tener contacto con ninguno) y que ahora son sus compañeros de santuario.

"Estamos tan felices por tener la oportunidad de ver como el comienza a interactuar con sus nuevos amigos monos... ningún animal merece una cosa semejante, es realmente algo que no puede ser un ser humano quien lo hace, porque me niego a que llamen ser humano a una persona que hace ésto"

Finalmente, Joe está ganando la libertad que el tanto merece! Su historia es conmovedora y un recordatorio de que éstos preciosos animales no deben nunca ser tratados como animales domésticos.

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