Muchos dicen que es mejor no llevarte el trabajo a casa, aunque para Dakota... fue lo mejor que pudo haber hecho! Conoce su historia aquí!

Hace 7 meses atrás, la oficial Dakota Beck respondía a un llamado y llegando al lugar, se topó con una casa con un espantoso olor a orina. En el patio, encontró un número enorme de perros en corrales en malas condiciones y procedió al arresto de la mujer propietaria de ese infierno, en el aparcamiento de su casa.

Entre los animales rescatados estaba Marty, un pequeño que no fue igual que los demás para Beck... desde que lo vio supo que aquel perro era para ella y él sabía que esa humana era para él...

Como manda el procedimiento, los animales deben ser requisados, enviados a un refugio local u hogares foster y permanecer allí a la espera que el juicio contra su tutora acabe y se determine la incautación definitiva de los animales, con lo cual los propietarios pierden el derecho sobre ellos y al fin pueden ser adoptados.

En Julio pasado, Beck quien trabaja como adjunta a la División de Servicios Animales del condado de Durham en Carolina del Norte, recibió una llamada por dos perros sueltos que se encontraban en la Sybil Drive. Cuando ella acudió para atender el llamado, pasó por una casa donde la invadió el olor a orina y heces que de ella provenían.

Pudo oír los ladridos procedentes del interior y en el patio trasero pudo encontrar una gran cantidad de perros en terrible estado, sucios, llenos de pulgas y garrapatas, con pelo enmarañado y sus corrales llenos de heces y orina.

Más perros había dentro de la casa que podía oírlos llorando. Llamó a la puerta y nadie respondía. Sin dejar el lugar, se comunicó por radio con su base, pidió a su superior la orden de allanamiento la cual fue prontamente diligenciada y enviados los refuerzos para realizar el rescate. Los animales fueron confiscados y evaluándolos presentaban quemaduras, deshidratación desnutrición y un abanico interminable de afecciones fruto de la negligencia de su tenedora. Marty era uno de ellos...

"Cuando entré para hacer el rescate, el literalmente se levantó con las fuerzas que le quedaban y me abrazó... ahí mi corazón no aguantó" dijo Beck. La dueña de ese infierno, Sandra Dee Lehto, fue acusada de 28 cargos de crueldad animal y luego de su juicio, además de las penas correspondientes, fue prohibida de tener o manipular animales.

Sandra Dee Lehto, fue acusada de 28 cargos de crueldad animal

"Ella comenzó con buenas intenciones, pero luego ya no tuvo dinero para alimentarlos o proporcionarles atención médica a todos éstos animales (...) tenía 31 animales en su propiedad, 3 de ellos no resistieron y murieron a causa de la vida que llevaban allí aunque intentamos salvarlos (...) otros sabíamos que eran perros porque ladraban, pero eran irreconocibles, extremadamente delgados y otros cubiertos por matas de pelo enmarañadas que mal podía verse que tipo de perro se trataba" dice el jefe de Beck, Capitán Anthony Prignano.

Maty estaba cubierto por una de éstas matas de pelo, olía espantoso a orina y heces, pero luego de ser rescatado y recibir los cuidados adecuados, todo empezó a mejorar para él y los demás. Beck fue cada día al refugio estatal para verlo y jugar con él, mientras esperaban el desenlace del juicio, donde cabía una posibilidad, aunque mínima, que el juez pudiera devolver algunos a ésta mujer.

Tras el rescate y la difusión del terrible estado de los animales, muchas llamadas telefónicas fueron realizadas al refugio, ofreciendo hogares para mantener los animales en régimen "foster" mientras las cosas se determinaban judicialmente. Todos fueron colocados en grupos de rescate o familias. Marty fue enviado al suroeste de Michigan, al refugio The Southwest Michigan Husky Club para ser rehabilitado y tratado médicamente, porque entre otras cosas, el tenía gusanos de corazón.

"Marty era algo así como un malvavisco tostado, aspero por fuera pero suave por dentro" dijo Suzanne Sarlls Hartwell, presidente de la organización que lo cuidó y agregó "Sabíamos que sería difícil colocarlo, porque el ya era casi un abuelo... lo primero que pensé, sabiendo del vínculo que había entre ellos, fue llamar a Beck para ver si ella quería a Marty una vez estuviera bien, e inclusive ella viajaría de regreso al condado, a 12 horas de distancia de donde ellos se encontraban ahora.

"Yo acababa de comprar una casa, todo salió como un cuento de hadas" dice Beck

Beck esperó 7 meses para poder acceder a tener a Marty con ella. Lo visitó regularmente en el refugio, ella no desistiría de él, ni el de ella y las personas del refugio supieron que allí entre ellos, había algo fuerte que no podían negar y cuando al fin el juicio contra su ex tutora acabó, el juez dictó la retención de los animales en favor del Estado y al fin! Beck y Marty pudieron llenar el papeleo e ir a casa!

Los otros dos Huskys hermanos de Marty, más jóvenes que él, fueron adoptados por familias donde están viviendo por primera vez una vida de perro y no el infierno al que los habían condenado anteriormente.

Beck dice que Marty y ella lo están pasando genial y que a pesar de todo, el es un perro feliz y ella una mujer feliz de tenerlo. "Tiene su propia habitación fresca y su plato de comida lleno, no le gusta mucho el calor, pero para solucionar ésto, siempre lo llevo a que disfrute de un buen baño fresco en el lago que es donde adora jugar"

Nos da mucho gusto que profesionales como Beck no solamente vean el trabajo con animales como un trabajo y que se note que lo llevan a un nuevo nivel, no solo por adoptar sus rescatados, porque es evidente que no podrán adoptar todos los animales que rescatan, pero que cedan a los encantos de esos "especiales" que nos encontramos en nuestro camino y que no es por casualidad... porque bien dicen que para cada persona hay un perro especial y en el caso de Marty y Beck, así ha sido!

Si desea conocer más ejemplares y conmovedoras historias de animales puede ingresar dando clic aquí

¿Te gustan las historias de animales? Únete a nuestra comunidad animalista: