La vejez como en los humanos, puede ser una etapa muy dura para los perros sino cuentan con la ayuda y cariño de la familia. Pero esta perrita está afrontando sus últimos años de la mejor manera con la ayuda de su dueño.

Cuando las personas envejecen, lo mismo ocurre con nuestros compañeros caninos. Por desgracia, ellos envejecen a un ritmo mucho mayor que nosotros. A pesar de ello, su deseo por amarnos y compartir cada momento a nuestro lado sigue igual que el primer día.

El señor Ootsuki y su amada Husky Pao, siempre habían tomando paseos juntos por los parques de Kyoto en Japón durante muchos. Pero lamentablemente, ella con 16 años se hizo mayor más rápido y enferma ya no podía salir a caminar por sus propios medios como tanto le gustaba.

La mayoría de personas ante una situación así, simplemente dejarían a su fiel compañera en casa. Otros dueños sin corazón y egoístas tratarían al animal como descartable, así que le aplicarían la eutanasia. Sin embargo, esto no era una opción para este abuelo que tanto la quería a su fiel compañera canina.

El señor Ootsuki quería compartir los mismos paseos que hicieron durante años y decidido a hacerlo pensó en la manera de transportarla por las calles sin tener que cargarla. Fue así que no encontró mejor solución que una cesta de plástico con ruedas, la cual acondiciono para poder llevar a su amada Pao de paseo comos siempre lo hicieron.

Como se ve, la gente los observaba y algunos se les acercaban viendo con admiración el transporte poco ortodoxo que utilizaban, mientras acarician a la perrita anciana.

Lamentablemente Pao ya cruzó el arcoiris y este video es parte del legado que nos dejó a todos los que tenemos (o tendremos) un familiar anciano o enfermo a nuestro lado, para valorarlos, ser tolerantes y tratar de que se sientan lo mejor posible hasta que llegue el momento de decir adiós.

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