Ante una gran necesidad, muchos hubieran dudado de hacer lo correcto y al encontrar una billetera con dinero lo hubieran utilizado, sin embargo Joel Hartman opto por devolver lo que no era suyo y darnos un gran ejemplo.

EE.UU.- Joel Hartman es un hombre sin hogar, vive en la calle y al estar hambriento fue a un contenedor de basura, buscando desperdicios de otros para comer, sin embargo se encontró con lo que pudo haber sido un día de pago fácil inesperado, la billetera de un turista con su identificación y tarjetas de crédito.

Hartman, quien admitió haber hecho malas acciones y algunos problemas legales en el pasado debido al alcohol y las drogas, a pesar de sus necesidades decidió tomar el camino alto y encontrar el titular de la cartera.

Tiene 36 años y camino por las calles del centro de Atlanta yendo a cuatro diferentes hoteles antes de encontrar a el dueño que se alojaba en el Omni Hotel.

Videos de vigilancia capturan a Hartman devolviendo la cartera a guardias de seguridad del hotel. Les dio un nombre falso, 'Josh Crabber,' pensando no necesitaban saber quién era, puesto que él estaba haciendo lo correcto.

Scott Stuckey, director general del hotel, se enteró que la cartera pertenecía a un turista francesa que había llegado a la ciudad para una conferencia.

La mujer informó a la policía de Atlanta, el día en que su cartera había sido robada el 7 de noviembre y ahora, gracias a la perseverancia y buena acción de Hartman, la había recuperado.

Con esa acción el director Stuckey sabía que era su turno y decidió hacer el seguimiento.

"Si buscás comida en un tacho de basura, probablemente vivís un momento difícil en tu vida. Pero cuando encontrás la billetera de alguien y hacés lo correcto, creo que a nosotros nos gustaría hacer lo correcto para esa persona", dijo Stuckey,

Se busco por las calles, hablando con la gente sin hogar, buscando a su héroe que devolvió la cartera. Una semana más tarde, después de escuchar a través del boca a boca que él era buscado, Hartman apareció en el Omni, donde personalmente Stuckey y el hotel quería recompensarle en gran manera.

A nombre del hotel, Scott Stuckey, dijo que quería ofrecer al hombre una recompensa por hacer lo correcto.Cuando Hartman regresó al hotel la noche del viernes, Stuckey le ofreció una habitación, $ 500, alimentos y ropa nueva. Hartman quedó mudo con ese gesto.

Todo lo que podía hacer era barrido Stuckey en un gran abrazo y gracias.

"Es sólo para hacer lo correcto. Tal vez alguien al ver esto, una persona drogada totalmente hacia fuera de lo normal y esas cosas, como ese tipo feo puede hacer lo indicado. Tal vez yo pueda, también," dijo el viernes.

Pero eso fue sólo el comienzo. Dado que el aprendizaje de la historia de Hartman, decenas de personas se han ofrecido a ayudarle.

"Estamos recibiendo llamadas de personas de todas partes de los Estados Unidos, desde Hawai, Canadá," dijo el lunes Stuckey. "Son todas las personas que quieren saber qué pueden hacer para ayudar."

Efectivo, tarjetas de regalo y ropa han sido puestos en hotel del centro. Otros han ofrecido comidas para las celebraciones de fin de año para Hartman, el empleo y la vivienda, etc.

El lunes por la tarde, Hartman visitó el salón del hotel, donde se cortó el pelo y la barba de corte. Él dijo que no ha tomado ninguna decisión sobre lo que va a hacer a continuación, pero está agradecido de poder tener tantas opciones, gracias a la gente que nunca ha conocido.

"Todo esto sólo ha sido increíble", dijo Hartman. "Me gustaría cambiar esto y ayudar a otras personas sin hogar. Sería realmente recorrer un largo camino para ayudar a un montón de gente."

Una página en línea de recaudación de fondos se ha creado para aquellos que deseen donar a Hartman.

Hartman dijo a WSB que ha vivido en la calle desde marzo, todo empeoro cuando murió su novia desde hace algun tiempo. Recientemente, él había estado durmiendo en el bosque en un suburbio de Atlanta. El tiene trastorno de déficit de atención con hiperactividad y tiene un tiempo difícil para mantenerse en un trabajo estable, pero que hace trabajos esporádicos.

Vía ajc.com