En estas fechas hasta hasta las luces de bengala, aparentemente inofensivas, pueden ser peligrosas para los niños porque están fabricadas con insumos tóxicos y pueden encender las prendas de vestir de los menores generándoles quemaduras.El peligro es mucho mayor si la ropa está elaborada con materiales sintéticos, cuyo contacto con insumos explosivos estimula que las mismas empiecen a arder.
“Una luminaria o luz de bengala colocada cerca de la ropa de los niños se va a prender y con eso quemar su piel, que es 40 por ciento más sensible que de los mayores”
Estos artefactos pirotécnicos están elaborados con insumos tóxicos, cuya ingesta también puede ser muy peligrosa. Estos productos muchas veces son elaboradas o importadas de manera clandestina pueden tener cantidades excesivas de pólvora, lo que incrementa su nivel de riesgo cuando son manipulados por los menores.
Los padres deben cuidar que sus hijos no adquieran pirotécnicos prohibidos, cuyas presentaciones con formas, nombres y promociones novedosas, están siendo ofrecidas de manera clandestina