Cuantas veces las personas se quejan e inclusive evitan ver imágenes fuertes sin siquiera compartirlas... tu compartido podría salvar una vida... y éste caso es el mejor ejemplo de ello. Conócelo!

Algunas veces vemos a las personas reclamar al respecto de la dureza de las imágenes publicadas en Facebook cuando se muestran animales maltratados y situaciones realmente lamentables que éstos inocentes padecen.

Pero la realidad dista mucho de lo que se cree o espera ver siempre con fotos de animales felices posando para una lente. Felizmente, somos testigos de que se ha iniciado un cambio y cada vez son más personas las que se están quitando la venda de los ojos, para ver la dura verdad que sufren tantos seres inocentes y tomar conciencia para hacer un verdadero cambio en el mundo con respeto y misericordia para toda la vida animal sin excepción.

Es cierto que hay algunos casos donde realmente las fotografías o vídeos no ayudan en nada, por ejemplo cuando no tienen datos de donde han ocurrido, cuando no se ha hecho la denuncia, cuando solo se comparten por ganar popularidad, cuando no hay una historia verdadera por detrás, o cuando la historia verdadera es desdibujada para causar más impacto, o cuando son fotografías antiguas de casos que ya se han resuelto o que inclusive los animales han fallecido y las noticias solo se dedican a compartir la fotografía por un fin de ser populares. Esos casos si que no ayudan en nada, pero para nada son los que nos ocupamos en Seamos Mas Animales.

Y un caso donde no fue solo una fotografía terrible, es el caso de éste pequeño, llamado Baby víctima de la maldad más pura y la insanidad de sus propietarios, que llegaron al punto de introducirlo dentro de una bolsa de Ziploc y tomar una fotografía.

Su excusa para hacerlo en ese momento fue la de que el pequeño no se quedaría quieto para tomarse una y por otra parte, demostrar lo pequeño que el perro era a sus "amigos".

Según se pudo investigar, el hecho ocurrió en noviembre de 2013 en Bernalillo, Sandoval, Nuevo México, Estados Unidos. Su propietaria, de nombre Mary Snell, de 44 años y su hijo Britton James Engel de 21, declararon a las autoridades que no era su intención maltratarlo, sino hacer una "broma" a sus amigos sobre su perro y lo pequeño que éste era, pero servicios animales constata que el animal, se encontraba en una bolsa plástica, con privación de suministro de oxígeno y que pudieron matarlo.

Afortunadamente y como para la mayoría de personas ésta acción despreciable de broma no tiene nada e Internet no es del todo privada y a que mucha gente eligió VER lo que sucedía, difundirlo, exponerlo en el mundo de forma viral y exigir justicia y el lógico retiro del animal de tan insanos propietarios.

Toda la difusión de estas crueles imágenes, logró que el condado, presentara cargos por crueldad animal contra Snell y su hijo Britton, además de haberlos podido identificar gracias a la fotografía del rostro de Snell riendo detrás del inocente siendo maltratado, fue posible saber que su hijo vivía con ella (lo cual lo convertía en coautor) y luego derivando en el arresto de ambos y posterior juicio.

Mira el vídeo de la noticia aquí:

Una vez en custodia ambos, ésta despreciable mujer aún admitió que había puesto al pequeño en el congelador, alegando que no sabía que eso podía ser perjudicial para el perro...

Afortunadamente gracias a las redes sociales y a publicaciones serias y comprometidas con el bienestar animal que no solo buscan difundirse y ya, sino que van más allá, procurando un verdadero sentido de justicia y ayuda a los animales involucrados, es que éste pequeño ya no padece siendo "cuidado" por éstas dos personas, sino que fue rescatado por el condado y entregado a una ONG para sus cuidados y posterior adopción en un hogar responsable, hogar que ya ha encontrado y ya no debe preocuparse de ser introducido en una bolsa plástica para ser expuesto como broma y tiene una vida digna, como cada perro debe tener.

Por eso cada vez que aquí compartimos fotografías y vídeos duros por si mismos, pedimos su difusión, pedimos no mirar al costado porque nos "hace mal", o cuestionarnos quien sacó la fotografía o porqué no hizo nada quien la obtuvo, porque a veces eso es lo de menos y lo que más importa es lograr la justicia para el caso que se está presentando y que por suerte alguien pudo registrar para que no pasara desapercibido y al olvido.

Cada vez que un humano mira para el costado ante el maltrato de un animal, puede estarlo condenando a que ese mal le ocurra más veces hasta su muerte y aunque te parezca que las cosas suceden al otro lado del mundo y que nada puedes hacer... solo mira el caso de Anubis, que gracias a que miles compartieron él, que vivía abandonado en Egipto, encontró un hogar para siempre en los Estados Unidos... a miles y miles de kilómetros y un idioma muy diferente de distancia...

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